Se llevó a cabo la novena entrega del 9º Premio Sebastiane Latino en el marco del 7º Encuentro de Festivales LGTBI latinxs del 69º Festival Internacional de Cine de San Sebastián, el pasado 21 de septiembre en Tabakalera, una antigua fábrica de tabaco hoy convertida en un centro cultural y artístico, que es casa de la sección más experimental del certámen vasco: Zabaltegi-Tabakalera.
El Premio Sebastiane a la Mejor película sobre diversidad sexual del Festival de San Sebastián se entrega desde hace 22 años y en sus esfuerzos visionarios por un cine más incluyente, han decidido desde hace casi una década, reconocer además a la Mejor película latinoamericana con esta temática, sin que necesariamente tenga que estar en la Selección del Festival. El Sebastiane Latinx celebra las voces recientes de un cine en la región, que reluce por empujar hacia la apertura y la inclusión social, en medio de cambios drásticos en política cultural y en materia de diversidad sexogenérica y de los avances retrógradas de grupos evangélicos de ultraderecha.
El año pasado el premio en su variante latina fue entregado a Las Mil y Una de la cineasta argentina Clarisa Navas, que con un lenguaje sensible y lleno de fuerza, se adentra en los barrios multifamiliares de Corrientes, Argentina, para construir un relato de crecimiento y resistencia de un grupo de jóvenes comenzando a ser adultos en lugares donde a pesar de la discriminación, pueden todavía encontrar el apoyo solidario de sus familias y amigxs.
Este 2021 el Premio Sebastiane Latino fue entregado a Medusa, de Anita Rocha da Silveria (Brasil, 1985), donde con una estética neón, presenta a un grupo de mujeres adeptas a una Iglesia Evangélica ultraconservadora de Brasil, que, durante las noches y muy a tono a la banda criminal de la Naranja Mecánica de Kubrick, persiguen a otras mujeres que no han cumplido con las normas de castidad y sumisión que la Iglesia impone a sus fieles mujeres.
La cinta que fue seleccionada en la pasada Quincena de lxs Realizadorxs de Cannes 2021, da un giro cuando una de estas chicas, Mariana, es despedida de su trabajo en un hospital de cirugía estética luego de que su rostro se viera rajado en una de los ataques nocturnos, liderado por ella, lo que la hace entrar a una marginalidad que la posibilitará al mismo tiempo experimentar con su sexualidad. “Hay un machismo estructural que obliga a la mujer a controlarse más que los hombres. Ese machismo introyectado en nosotras nos dices que debemos tener cuidado en cómo presentamos nuestra sexualidad”, expone la realizadora en brasileña en entrevista con Gehitu Magazine por el Coordinador del Premio Sebastiane, Nicolás Zubirán.
Cuando escribí la película, escribí pensando en un futuro próximo pero ahora vemos que está sucediendo. Esperamos que las cosas en Brasil puedan cambiar con las elecciones del próximo año. Tenemos esperanza
Anita Rocha da Silveira, directora de Medusa
Medusa que también forma parte de la Competencia Iberoamericana del Festival de Cine en Guadalajara, revela ante todo la condición desfavorable e injusta de mujeres jóvenes que tienen que adscribirse a grupos religiosos para poder estar “integradas” en sociedades altamente patriarcales y conservadoras. Pero cuando la protagonista ya no puede ser parte totalmente, vivirá una experiencia que la hará reaccionar, en un grito literalmente, en contra de un sistema que las condena y reprime e incluso entre sus propias compañeras, aunque también surgirán nuevas posibilidades en quienes empiecen a aceptar sus deseos.
La presea del Sebastiane Latino fue entregada a representantes de Best Friends Forever, distribuidora internacional de la película, por la directora Clarisa Navas. Anita Rocha da Silveira vía remota agradeció el premio con el siguiente mensaje: “Es un gran honor este premio, estoy muy agradecida. En Brasil estamos viviendo un tiempo muy complicado y oscuro de incertidumbres por el gobierno que hay ahora con Bolsonaro. Hay muchos prejuicios con los géneros y con las personas LGBTQ* porque es un gobierno homófobo, racista y patriarcal. Escribí Medusa en 2015 porque quería escribir sobre la libertad: que se puede ser libre sexualmente, que se puede hacer lo que se quiera sin tener esta restricción ni conservadurismo, ni política patriarcal que estamos viviendo actualmente y que nos hace querer explotar para sacar nuestros sentimientos”.
Rocha da Silveira también dedicó este premio a las juventudes en aras de que puedan expresar y explorar sus sexualidades libremente en medio de las represalias a las disidencias por parte del gobierno de Brasil actualmente. “Cuando escribí la película, escribí pensando en un futuro próximo pero ahora vemos que está sucediendo. Esperamos que las cosas en Brasil puedan cambiar con las elecciones del próximo año. Tenemos esperanza”, finalizó.
